VERDAD CENTRAL
Dios manifesto su gracia a través de Jesucristo para damos libertad y salvación, no para convertirla en libertinaje y utilizarla como permiso para pecar.
DESARROLLO DE LA LECClON
l. CONCEPTO BlBLlCO DE GRAClA
El concepto de “gracia” ha sido un punto debatido en los sistemas que disertan sobre el tema. Muchas posiciones y definiciones han surgido a lo largo de la historia de la teología Las Escrituras definen Ia gracia como un regalo de Dios hacia Ia humanidad caída que por cierto es totalmente inmerecido.
AI adentramos en el tema, debemos comenzar definiendo Ia terminología bíblica tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento.
I. Antiguo Testamento
Uno de los principales términos que arroja el hebreo del AntiguoTestamento esjen, que significa “misericordioso”, “generoso”, «benevolente»; asf es como Noé hallé gracia ante Ios ojos de Jehová (Génesis 6:8).
Por Ia desdichada vida del hombre y su ciertísimo futuro destinado a la muerte, luego Jehová Dios, en su buena voluntad, comienza a dispensar sus favores, siendo eI mayor de todos, la salvación llevada a cabo por él mismo. Es Dios quien, en su generosidad, pone Ios medios para que el hombre sea salvo.
Otro término que usa el Antiguo Testamento es jesed. cuyo significado principal es “misericordia», “caridad”, “benignidad”. Así es como entendemos que Dios puede hacer misericordia a millares (Exodo 20:6). Su misericordia es tan Limpia y pura. su caracter caritativo tan necesario para nosotros, y su benignidad como una merced hecha, precisamente, de pura gracia, debemos amar estas características de Dios, ellas lo identifican a él y a nosotros nos recuerdan nuestra humanidad caída. El término ratson es expresado en las Escrituras veterotestamentarias significando “contentamiento”.»aceptación».“buena voluntad». Así es como se entiende la buena voluntad de Dios, incluso hacia aquellos que una vez castigó) por su desobediencia.
pero que ahora han experimentado eI arrepentimiento y su subsecuente perdón (lsaías 60:10). Esa reacción divina es precisamente la que se proclama durante anuncio del nacimiento del Mesías (Lucas 2:14).
2. Nuevo Testamento
El griego del NuevoTestamento solo utiliza el término jaris para nombrar eI concepto de “gracia”; aún así es expresado en varios sentidos. En primera instancia Io podemos ver como “encanto»,“atractivo”, una especial forma de expresarse que encanta a quien escucha (Lucas 4:22; Colosenses 4:6). y provoca Ia necesidad de seguir escuchando. Se puede incluso manejar como agradecimiento, tal y como lo hace nuestro Señor Jesus en Lucas 17:9 y el apostol Pablo en Romanos 6:17.
Sin embargo también se expresa con el mismo sentido del hebreo jen como una actitud favorable. libre y totalmente gratuita de Dios hacia Ios hombres Así vemos que la salvación en su totalidad, depende de Dios. En el NuevoTestamento encontramos eI significado pleno de la gracia, Ia cual fue traída por medio de Jesucristo (Juan l:I7) y que a través de la justicia de Dios en el propio Jesus (Romanos 3:2 I-25), se ha hecho patente en el corazón del pecador arrepentido para justificarlo gratuitamente ante eI Juez de toda la tierra, reconciliándolo así con un Dios justo, misericordioso, generoso y benevolente, que sigue dispuesto a dispensar sus favores.
ll. LA GRAClA COMO LIBERTINAJE
La incorrecta interpretación de textos que expresan algún concepto de la gracia ha provocado que algunos se extravíen aI grado de pensar que, si mas pecado cometen, Luego Ia gracia se vuelve mas abundante, ejerciendo una fuerza positiva y poderosa que al final de cuentas y sin importar lo que hagan, todo lo perdona.
I. La supergracia (concepto practice)
Hablamos aquí de una practica que ha resurgido en los últimos años, Consiste en pretender permitir que la poderosa, y sobre todo abundante gracia de Dios haga su labor. sobreabundando cuando eI pecado abunda. Sus proponentes apelan al poder infinito de la gracia para perdonar pecados, especialmente aquellos que pueden ser deliberados en cuanto a la cultura.
La supuesta madurez cristiana es también Ia base para las practicas de estas personas. que van desde tomar una cerveza en un restaurante o en su propia casa, y fumar cigarrillos. e incluso Ilevar una vida sexual relajada, Levantando Ia bandera que los identifica como “maduros”. Obviamente. quienes Ios critican son tratados como fariseos inmaduros que no han crecido en la gracia del Señor.
Para estos supuestos cristianos ya no importa eI buen testimonio que deben proyectar, se preocupan mas bien por sus propios actos.
2. La superabundante gracia de Dios (concepto teológico)
Si las aguas del pecado se multiplicaron la gracia de Dios se desborda, Ya que cuando el pecado abundó, sobreabundó Ia gracia (Romanos 5:20). EI pensamiento teo|ógico de esta corriente expresa que la superabundante gracia de Dios jamas se verá reducida por causa del pecado. Según esta corriente, el creyente, entonces, tendría un ilimitado suministro de gracia siempre disponible para él. Este concepto dibuja Ia gracia como una especie de superhéroe que combate. en todo tiempo y a voluntad del hombre. todo pecado que se practica voluntaria e involuntariamente.
Ellos dicen que este concepto no merma en nada Ia salvación, ya que ésta es segura, puesto que es un Iogro eterno de Dios.Así Ia gracia emerge sustentada por la justicia divina para la vida eterna es decir, la superabundante gracia de Dios es vista como una viva demostración de su obra que cambia la vida del hombre dandole una verdadera Libertad en Cristo. Sin embargo, se olvida de la advertencia bíblica de tener cuidado y no usar Ia Libertad como pretexto para hacer Io malo (1 Pedro 2:13-17).
Así que el concepto teológico de este pensamiento, en la práctica por convertir Ia libertad cristiana en libertinaje, al tergiversar eI sentido biblico de la gracia divina.
Ill. LA GRAClA, EL DON INMERECIDO
La gracia es esa disposición (mica de Dios, mediante Ia cual nos ha amado y ha tenido a bien salvarnos y Librarnos del pecado y la condenación mediante nuestro Señor Jesucristo. Luego el hombre queda total y absolutamente desprovisto de cualquier mérito que pudiese adjudicarse en cuanto a la salvación.
1. Una gracia inalterable
La gracia depende en su totalidad de Dios; es el regalo inmerecido para el hombre
caído, Ia cual viene por y gracias a Ios méritos del Señor Jesucristo (juan 1:17;Romanos 3:24). Es en Cristo cuando se hace efectiva. otorgándonos eI perdón de pecados y la salvación.
Las bendiciones reservadas para el hombre en los Iugares celestiales, son eI resultado
de estar en un estado de gracia ante Dios, éI nos Ias otorga en su infinita bondad. En ese sentido, la gracia es inalterable en su naturaleza, porque no esta circunstancia a la actividad de Ios seres humanos. pues entonces perderán su esencia
Enun sentido estricto, Iagracia en sn’ misma no puede convertirse en Iibertinaje porque es algo que Dios da. Sin embargo. su erro’nea percepcién sf puede Ilevar aI hombre a usar esa gracia como pretexto para una conducta pecaminosa Pero nunca se nos otorga la gracia como un permiso para pecar, sería inapropiado pensar esto; antes bien. ella nos invita a permanecer en Cristo y a alejamos de todo mal.
2. Una gracia alterada
Pablo enseña Ia eficacia y el poder incontenible de la gracia cuando Ilega aI hombre
mediante Ia justicia de Cristo. Es tan eficaz, pues por ella Dios cambia al pecador de una posición de condenación a una posición de justificación (Romanos 5:I); es tan poderosa. ya que por ella el Señor perdona eI pecado del hombre (Romanos 5:20); pero hay que ver de qué forma. porque mientras más pecaba la gente, más abundaba Ia gracia maravillosa de Dios (Romanos 5:20 NTV).
La acción eficaz de Ia gracia no depende del pecado. aunque así parezca. De ahí Ia declaración del mismo apóstol Pablo: Qué, pues, diremos? {Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? En ninguna manera… (Romanos 6:I-2); ya que. si así fuese, entonces valdría Ia pena pecar. pero no es así.
La gracia vino porque Dios quiso salvamos. no porque tenia que hacerlo. No podemos considerar la abundancia de la gracia como supeditada al pecado. sino que por eIIa el Padre nos ha Iibrado de la maldad.
Es en ese estado en el que el creyente puede hacer cal|ar a Ios insensatos mediante Ia practica de la verdad y el buen testimonio, sin menospreciar Ia gracia de Dios, y mucho menos alterando su significado. Pero cuando el hombre va más allá del concepto puro de la gracia. y se extravía en su propia prudencia, entonces Ia sustituye por Iibertinaje. Algunos extraviados en la práctica vigente de la supergracia se convierten en simples Iacayos del pecado. escondiéndose detrás de una profesión de piedad. que degenera con el tiempo en un estado de pecado (Judas 4).
CONCLUSION
Fue por la gracia divina que fuimos salvos. No había mérito alguno en nosotros; éramos inmerecedores del favor del Altísimo, pues estábamos en enemistad con éI. Pero aI extendemos su gracia nos salvo y perdonó nuestros pecados.
En eso consiste Ia gracia divina Es el hecho de que en Cristo nos salvó de la condenación y en el presente nos bendice y nos ayuda para vencer el maI.
No hay lugar en la Escritura para considerar esta gracia como una Iicencia para el libertinaje. No podemos usarla como un pretexto para pecar. Mas bien debe estimularnos a la gratitud, a la santidad y al servicio a Dios que nos salvo en su bondad. Bendita gracia, sublime gracia