[dropcap]L[/dropcap] a economía de los países, empresas y la misma economía doméstica están en un precario equilibrio. El uso del dinero pone a prueba la sabiduría (Proverbios 23:5), fidelidad, y la habilidad del administrador.
Cuando Dios iba a sacar a su pueblo de Egipto sacudió a los dioses falsos de la época, el sol que era un dios para ellos fue oscurecido por tres días, el rio Nilo se corrompió y así pasó con todos sus dioses. Las naciones deberían saber quién es el verdadero Dios.
El Señor está por sacar a su Iglesia de este mundo y los dioses falsos tienen que ser sacudidos (países, empresas, filosofías, dinero…).
Los gobiernos y empresas se rodean de profesionales de la economía, sin embargo, las políticas que se adoptan dan resultados poco satisfactorios, es un fenómeno que viene del cielo y poco se entiende, los niveles de precios subirán hasta el tope señalado por Dios.
(Apocalipsis 6:6). El salario de un día sólo alcanzará para comprar un kilo de harina. Pero debemos recordar que en Egipto el pueblo de Dios no sufrió las calamidades. Así ocurrirá en nuestros días. ¡Dios ha prometido bendecir a su pueblo, sea cual sea la situación!
Existen principios bíblicos los cuales han probado su efectividad en medio de las crisis más severas que recuerde la historia del ser humano.
Es muy oportuno mencionar que la obra del Señor requiere de recursos materiales y él ha contemplado un esquema de parámetros y principios mediante los cuales se pueden captar los recursos necesarios y suficientes para el sostenimiento y buena marcha de su obra.
Por esta razón él pide para este propósito y lo hace siguiendo estos mismos principios, si nuestra respuesta se ajusta a lo que Dios exige, las bendiciones de parte suya no se harán esperar.
Para tener una economía sana, se sugiere hacer un presupuesto de ingresos y egresos, esto nos permitirá guardar equilibrio entre ingresos/gasto. Además recomendamos lo siguiente:
En primer lugar: Dios pide una décima de cualquier ingreso que se perciba y su petición la acompaña de una linda promesa (Malaquías 3:10).
Otro principio es: que cuando él pide, la respuesta no debe ser demorada (Éxodo 22:29). Lo mismo se observa cuando se hacen votos al Señor (Eclesiastés 5:4).
El siguiente principio es: que a Dios se le debe dar primero. La buena administración de los recursos, para que le sea agradable, él debe tomar el lugar prioritario.
Vea el relato de la viuda de Sarepta y el profeta Elías cuando había escases, allí se puede descubrir este tercer principio (1 Reyes 17:8-16).
Buen uso de tarjetas de crédito: Teniendo una economía sana, se puede recurrir al buen uso de las tarjetas de crédito o endeudamiento para realizar proyectos de crecimiento en la economía, o adquirir bienes y servicios de inmediato.
Nuestro país cuenta con financiamiento blando, como actualmente no se tiene en otros países, ni en los Estados Unidos ni en Europa. En ocasiones la banca ofrece a sus clientes créditos con estas características que se pueden aprovechar.
Hay sitios que ofrecen múltiples herramientas para hacer crecer un negocio, para decidir qué clase de crédito se adapta a las necesidades y posibilidades, para créditos empresariales, pedir préstamos, y si usted tiene excelentes recursos hay también consejos de inversión y otros.
Nota: Siempre que contrate un crédito asegúrese de que la tasa de intereses sea fija, nunca variable.
Mal uso de tarjetas de crédito:
Si se hizo un mal uso de las tarjetas o no se cumplió con los compromisos de pago, el siguiente consejo y comentario puede ser de utilidad: Las deudas son una triste realidad en la vida de todos estos días. No puede encontrarse ninguna solución rápida y estable para los problemas de la deuda, pero hay una forma de mejorar este estado, la consolidación de deudas. Deber dinero a diferentes bancos o compañías de préstamo y tener que hacer pagos cada mes puede ser una carga muy difícil que a veces se puede fallar al llevarla a cabo. Todos los impagados y coleccionistas de deuda, sin dejar de mencionar la permanente amenaza de quiebra, ponen en las personas una gran cantidad de estrés cada mes. Puede mejorar su situación financiera obteniendo una consolidación de la deuda. Este procedimiento financiero implica consolidar todas sus deudas y su pago a través de un único pago mensual. Tener que hacer un único pago cada mes puede aliviarte del estrés de pago de facturas y mejorar su calificación crediticia. Obtener una consolidación de la deuda también puede ser una manera de ahorrar dinero. Sin duda será menor que la suma de todos sus intereses, los intereses establecidos para este préstamo de consolidación. Nacional Financiera del Gobierno federal.
Ciclo de las deudas:
- Necesidades o deseos latentes,
- Sujeto de crédito,
- Consumo diversificado,
- Descontrol en relación ingresos/deuda,
- Reunificar deudas.
En todo caso el ideal de la economía sería no tener que recurrir a ningún financiamiento siguiendo el consejo de la palabra de Dios: No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley (Romanos 13:8).
fuente: aviva 2012 — 003