¿PRESTADO O REGALADO?
Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses. Mateo 5:42.
Resuenan al oído las sabias palabras: No les prestes… mejor dales. Dales lo que puedas. Así no te quedas esperando que te paguen.
El suspenso de la primera expresión de escucha como una negación. Retomar la frase y hacer la ilación completa cambia todo, se trata de un alma generosa que no se cansa de hacer el bien, sin esperar al pago, el que nunca llega, a veces llega, casi siempre, casi al final pero llega.
Que importante es dar lo que se puede dar. No se puede dar lo que no se tiene. La riqueza se descubre en la grandeza de la creación que Dios hizo para que habitásemos sin carencias. Pero también se genera en la mano emprendedora del hacendoso, aquel que transforma todo lo que llega a sus manos en bienes y servicios para que la gente obtenga beneficios a su propia cuenta.
Luego viene también la oportunidad de dar con generosidad. Nuestro Dios es abundante y generoso; ha dotado la creación y la naturaleza con más recursos de los que necesitamos. Somos nosotros los que aprovechamos la oportunidad de manifestar su gloria, cuidando la naturaleza y compartiendo a los demás lo que hemos recibido, para que la bendición corra y la prosperidad se multiplique. Todo lo que damos se multiplica cuando va de mano en mano; todo lo que detenemos se viene a menos, porque nos es imposible cargar toda la abundancia que Dios diseñó para nosotros.
Tenemos también la consigna de dar, sabiendo que es por amor a Cristo y al necesitado. Lo que hiciste a un hambriento, sediento y desnudo, a mí lo hiciste. Esas palabras resuenan como un modelo de vida digno de imitarse. Cristo se empobreció para enriquecernos a nosotros. esta imagen del Cristo empobrecido me impacta, porque nuestro Señor es super proveedor.
Las intenciones como los propósitos definen la vida real de una persona, por medio de sus hechos. Las instituciones benefactoras se integran con personas generosas, dispuestas a contribuir voluntariamente para aliviar la escasez de los demás, sin distingos sociales, raciales, religiosos y políticos.
¿Prestar? Dijo el ranchero que lo emprestado es pariente de lo dado. Cuanta sabiduría y moraleja existe en las verdades campiranas. Hay una disposición en el corazón y esa es la que va a sobresalir en mostrar la utilidad e inclinación de la persona hacia el bien de los demás. De otra manera se convierte en la vida inútil de Pito Pérez.
No se trata de servicio al cliente o que el cliente siempre tiene la razón. Se trata de hacer lo que honre y glorifique el nombre de nuestro Dios. ¿prestamos o damos? ¿Nos rehusamos o accedemos? ¿la clave está en la actitud? ¿el que pide es un mal ejemplo? ¿el que da se vuelve pobre? ¿En el cielo hay estrellas y… no te presto las botellas porque te quedas con ellas?
