La Biblia proporciona orientación para instruir y proteger a la familia. Isaías 26:3
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.
A la mayoría de los padres les encantaría construir una cerca alrededor de sus hijos para protegerlos de los efectos nocivos de vivir en un mundo caído. Si bien no podemos hacer eso, Dios nos da algunos principios que nos protegen a nosotros y a nuestra familia del mal que nos rodea. Esta lección trata de la importancia de cultivar relaciones sanas, evitar hábitos destructivos y priorizar nuestra relación con Dios. Al obedecer el consejo de nuestro Padre prote geremos a la familia que Dios nos ha encomendado.
La tarea más importante de los padres es proteger a sus hijos de cualquier amenaza. Lamentablemente, muchos padres en nuestra cultura limitan esa labor a la protección física. Aunque brindan alimentos ropa, amparo y protección de los depredadores, no comprenden la importancia de proteger a sus hijos de los enemigos espirituales que quieren robarles el alma. Incluso los padres cristianos que se esfuerzan al máximo pueden tener dificultad con esta tarea. La Palabra de Dios nos da dirección sobre las cosas que podemos hacer. Luego debemos confiar en Dios y orar para que nuestros hijos tomen buenas decisiones respecto a su relación con Dios.
Parte 1 – Busque relaciones saludables
□ Evite las influencias nocivas 2 Corintios 6:14-16
Si bien este pasaje a menudo está vinculado a matrimonios y asociaciones comerciales, su aplicación más amplia es a cualquier relación cercana. Pablo hace un contraste entre creyentes e incrédulos: la justicia y la injusticia; la luz y la oscuridad; Cristo y el diablo; la adoración de Dios y la adoración de ídolos (2 Corintios 6:15,16). Debemos cultivar rela ciones que nos acerquen más a Dios.
Pablo se ocupó del problema de los falsos maestros que se habían infiltrado en la iglesia y estaban tratando de apartar a los creyentes de su lealtad a Pablo y al verdadero evangelio. Estos falsos maestros querían desviar al rebaño, no pastorearlo.
En cinco preguntas, Pablo desafió a los creyentes de Corinto a ver la necesidad de evitar las influencias de estos falsos maestros. Si los creyentes no evitaban a estos falso maestros, se estarían «[uniendo] en yugo desigual» (v. 14) con los incrédulos, y dañarían su relación con Cristo. En cambio, los creyentes, tanto adultos como niños, deben evitar las relaciones cercanas con los incrédulos y las actividades que promuevan la maldad, lo cual los alejará del Señor.
□ Entienda a quién pertenece usted 2 Corintios 6:16-18
Los creyentes no deben olvidar que la esencia del cristianismo está en tener una recta rela ción con Dios, no en cumplir reglas o seguir una tradición. Los creyentes deben aferrarse a relaciones y actividades que promuevan lo que es santo y justo a los ojos de Dios.
Por la fe en Jesucristo, Dios perdona nuestros pecados y nos da vida cuando el Espíritu Santo viene a morar en nosotros. Luego, el Espíritu obra a través de la Palabra para transformarnos a fin de que vivamos como hijos e hijas de nuestro Padre celestial. En 2 Corintios 6:17,18, Pablo citó porciones de Isaías 52:11; Ezequiel 20:34; y 2 Samuel 7:14 para recordar a los creyentes que si nos enfocamos en Aquel a quién pertenecemos, evitaremos influencias dañinas que podrían perjudicar nuestra relación con Dios.
Los padres pueden enseñar mejor a los niños a buscar relaciones sanas al modelar las actitudes y acciones correctas. Explique a los niños por qué deben tener actitudes piadosas y tomar decisiones sabias, y no solo seguir reglas. Los niños están mejor protegidos de las influencias nocivas cuando entienden por qué las cosas son buenas o malas, y cómo sus elecciones afectan su relación con Dios y con los demás.
Parte 2-Absténgase de hábitos destructivos
□ El engaño del pecado Proverbios 23:31-35
Los padres deben enseñar a sus hijos lo que Dios dice en su Palabra acerca de los hábitos destructivos. Se debe presentar la instrucción de modo que los niños comprendan que sus padres quieren lo mejor para ellos. Los padres cristianos hacen bien en prestar atención a las advertencias bíblicas sobre los efectos dañinos de los hábitos que controlan la vida, y en enseñar a los niños sobre sus peligros. Sea un ejemplo piadoso para su familia al evitar los hábitos destructivos. Confíe en la Palabra de Dios y en la dirección del Espíritu para ayudarlo a usted y a sus hijos a tomar decisiones sabias.
Proverbios 23:31-35 muestra los efectos dañinos del alcohol. Como la mayoría de las sustancias adictivas, puede traer breves períodos de placer y de escape de la realidad. Eventualmente quita más de lo que da. Aun cuando las personas se dan cuenta de que los hábitos destructivos los lastiman a ellos y a quienes los rodean, descubren que se han convertido en esclavos del alcohol o de otras sustancias. No tenga miedo de pedir ayuda cuando está luchando con adicciones al alcohol, las drogas (legales e ilegales), los juegos de azar y el sexo. Hay muchos grupos disponibles para apoyar a los hijos adultos y adoles centes (o a sus padres) que batallan con las adicciones. Sin embargo, uno nunca tiene que parar lo que no comienza. Así que tenga cuidado de no comenzar algo que «al fin como serpiente morderá» (Proverbios 23:32).
□ Viva sabiamente Efesios 5:1-5,15-18
Efesios 5 incluye tres principios para vivir sabiamente y evitar los hábitos destructivos. El primero es considerar si la decisión que está tomando refleja el carácter de Dios. «Sed, pues, imitadores de Dios» (v. 1). Cristo mismo reflejó la naturaleza amorosa de su Padre, al estar dispuesto a sacrificar su vida por el bien de los demás. El segundo es evitar las elecciones que conduzcan a la inmoralidad sexual, impureza o avaricia (w. 3,4, ntv). Estas muestran un desprecio por Dios y su consejo sobre la mejor manera de vivir. El tercer prin cipio de basa en usar la sabiduría que proviene de la obra del Espíritu Santo, y aprender a practicar la verdad bíblica (w. 15-18).
La Palabra de Dios proporciona una perspectiva divina de los hábitos destructivos. La inmoralidad, la impureza y la codicia no reflejan la naturaleza santa y amorosa de Dios. Los pecados mencionados en estos pasajes se relacionan con los placeres de la carne, que a menudo se convierten en adicción. Por ejemplo, el consumo social de alcohol puede convertirse en un alivio del estrés.
Debemos tomar en serio nuestro llamado a vivir guiados por el Espíritu. Abandonar los placeres de la carne se hace más fácil conforme experimentamos el gozo que viene de vivir para agradar al Señor.
Parte 3-Ame a Cristo por encima de todo lo demás
□ El primer compromiso es con Dios Marcos 3:31-35
Si bien la declaración de Jesús en Marcos 3:34,35 puede parecer controvertida, refleja el precepto más básico de la Biblia: amar a Dios de todo corazón (Deuteronomio 6:5). Algunos malinterpretan Marcos 3 para significar que seguir a Jesús es abandonar los lazos familiares, este pasaje se debe interpretar a la luz de toda la Biblia. En la cruz, Jesús se aseguró de que su madre, María, fuera atendida (Juan 19:26,27). Más tarde, María y los hermanos de Jesús estaban entre los reunidos para orar y esperar el derramamiento del Espíritu (Hechos 1:14). Si bien Jesús hizo de la búsqueda de los asuntos de su Padre su máxima prioridad, nunca abandonó a su familia.
Una familia que sirve a Cristo puede hacer estos sacrificios con gratitud y fortaleza en lugar de con resentimiento cuando su compromiso con el Señor es su máxima prioridad.
□ Su vida no le pertenece Mateo 10:37-39
¿Cómo pueden los creyentes en Cristo vivir en forma sacrificial? Entienden que deben amar a Cristo por encima de todo lo demás, porque su vida le pertenece a Él. Creen en las afirmaciones de Cristo de que morir a sí mismos les da la vida verdadera en el mundo actual y la vida eterna en su presencia en el mundo venidero.
¿Es posible ser un cristiano informal? Jesús indica que esa elección es poco probable. Él enseñó que sus seguidores debían servirle sin temor a la oposición. Nuestro compromiso con Él podría generar oposición de la misma familia, pero poner nuestro compromiso con Él por encima de nuestras relaciones terrenales más cercanas e incluso de nuestra propia vida resulta en ricas bendiciones.
¿Qué nos dice Dios?
La Biblia brinda orientación para instruir y proteger a la familia. Nuestras relaciones más cercanas deberían ser con personas que nos alienten en nuestro caminar con Dios. Los creyentes deben vivir sabiamente y elegir amar a Cristo por encima de todo los demás.