MOVILIDAD, ACCESO Y SUMISTRO ESPIRITUAL
En México existen más de 120,000 centros de reuniones de carácter religioso. Uno por cada 1,000 habitantes, aproximadamente. El primer lugar lo tienen los pentecostales. El segundo lugar -aun con todas sus divisiones internas- la iglesia católica, la cual suma en sus casi 100 diócesis más de 12,000 lugares.
Las crisis en el mundo mostraron qué hacer frente a las recesiones para lograr una forma de progreso. Los cambios sociales siempre fueron acompañados de una predicación a la necesidad del momento, pero vigente en la trascendencia. Por ejemplo a la segunda guerra mundial le sobrevivió una especie de mejora paralela en la industria comercial, militar, tecnológica, social, religiosa y alimentaria hasta pequeños y grandes espacios para recreación, iglesia, centros comerciales, tiendas y espacio para el consumo.
Mirando de manera paralela al desarrollo de las iglesias, en el caso de nuestro país arroja a este tiempo en tiendas formales de diferentes tamaños y formatos aproximadamente: 2,572 Walmart, 815 Soriana, 306 Chedraui, 65 HEB, 1,200 Elektra, 355 Famsa, 19,000 Oxxo. En el caso de restaurantes, fondas y cafeterías: 451,854. También 11 mil 774 gasolineras 41,500 zapaterías, 60,000 panaderías, 113, 748 Carnicerías y pollerías, 35,000 farmacias, 24,000 unidades médicas, 75 escuelas de medicina y más de 17,000 salas de cine, siendo nuestro país el 4 lugar cinéfilo del mundo
Dicho de otra forma, en cuanto al número de habitantes, hay un templo por cada 1,000, un cine por cada 17,000, una tienda por cada 5,000, un expendio de alimentos y bebidas por cada 250, una Gasolinería por cada 1,000, una zapatería por cada 2,500, una panadería por cada 2,000, una carnicería por cada 1,000 y una farmacia por cada 3,400.
Espiritualidad, alimentos, salud, tecnología y movilidad son los desafíos de lo que se aproxima. Una perspectiva muy actual en todo lo que se ve hoy es: lo más cercano a casa es lo mejor para adquirir. Duro golpe a la globalidad, entonces no hay nuevo orden mundial. Bueno, no es tan fácil.
La única razón por la que veremos y viviremos una nueva fase es porque el Señor dará una nueva oportunidad al mundo para buscar su rostro. Me ayudas a orar por esto: ¿cómo aprovecharemos la nueva realidad, para seguir predicando el evangelio? ¿cómo será la nueva expresión de un avivamiento? ¿cómo hacer vigente un plan de salvación a la nueva mentalidad del hombre en el siglo XXI?