El Pbro. Guilermo Fuentes Ortíz,
Conoció a Cristo y fue salvo a los 14 años de edad
fue vice-presidente Nacional de jóvenes –
Fue 20 años el superintendente nacional de las Asambleas de Dios 1960 a 1980
Participó en los 100 años de las Asambleas de Dios en USA
Participó y recibió reconocimiento por mas de 50 años de Ministerio ininterrumpido en el concilio Nacional celebrado en Querétaro en el año 2014.
con 89 años de edad al año de 2016
Pastor del templo Emanuel de la ciudad de México y gran líder cristiano.
mira este video donde el propio Pastor narra parte de su obra y Ministerio.
2 de noviembre 2017, descansa de su labor al ser llamado a la presencia de Dios
El Secretario General del concilio Pbro Guillermo Rodríguez escribió este comentario al dar la noticia
Hay historias que resultan incompletas si no se cuenta la vida de ciertos y destacados personajes. Asambleas de Dios tiene una de ellas.
En su tiempo intermedio tuvo como Superintendente General al Pbro. Guillermo Fuentes Ortiz, que recién fue recibido en gloria y en victoria en las moradas celestiales. Paladín de la fe, héroe de mil batallas, amó a Dios y a sus Asambleas hasta el final y por encima de todo.
De memoria impresionante, su presencia misma transmitía la solidez de la eclesialidad. Las anécdotas le fluían como si las hubiera vivido el día previo, aunque ya hubieran transcurrido décadas de ello. El hablar con tono al tiempo de agitar la mano le hacían captar de inmediato la atención. Llenaba los espacios con su mera presencia y literalmente llegó a todo el país y más allá en el ejercicio de sus encargos.
Fue hombre de hogar, pastor, maestro; líder encumbrado y altamente estimado. Lo recuerdo en el campo, en la cátedra, en el púlpito, en las palestras convencionales y conciliares. Mi esposa y yo los encontrábamos frecuentemente en el McDonald’s de Taller a él y a su amada María, ya con el Señor.
Al vernos compartíamos la mesa y empezaba la conversación con un: “María, ¿ya te dije de dónde es Guillermo?” Después de algunas ocasiones de contar la historia la hermana María le replicaba con un ligero toque en el antebrazo, “Sí, Guillermo, ya me lo contaste”, pero eso no lo detenía, volvía a contar la experiencia extrema que vivió en Chetumal cuando el Janet, un violento huracán que lo arrasó todo a su paso, casi termina con su vida, si no hubiera sido por la providencial intervención de mi abuelo y padre que momentos antes los forzaron a salir del templo El Buen Pastor para ir a refugiarse a la casa de mis abuelos. Al día siguiente solo quedaban las ruinas del templo pero ellos resultaron ilesos.
Así como ésta, las historias le venían espontáneamente. Incansable, lúcido, luchó hasta el final y recién entregó la vida al Creador. Las Asambleas de Dios toda agradece a Dios por su vida y expresa su pesar a la familia Fuentes Arrona. Descanse en paz…
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